Boda en Fase 1
Que este 2020 está siendo el año más extraño que hemos vivido no hace falta que lo digamos ¿no? Empezamos el año de la mejor manera posible, trabajando de fotógrafos en una boda de esas súper bonitas y nos dio tiempo a hacer unas cuantas bodas más y un montón de prebodas antes de que llegara el coronavirus para quedarse en nuestras vidas.
Durante el confinamiento hablamos mucho con todas nuestras parejas que se casaban en esos meses, en marzo, abril y mayo. Y como era lógico la mayoría aplazaron sus bodas hasta saber como iba a ir evolucionando toda esta situación. Pero Miriam y Miguel no paraban de darle vueltas, para ellos la fecha que habían elegido para su boda era importante, el día 30 de Mayo y casarse aunque fuera en la intimidad, solo ellos y su familia más cercana en una ceremonia religiosa les parecía la mejor opción. Ya habría tiempo para celebrar con todo el mundo más adelante.
A una semana de la boda estábamos pendientes de si Madrid pasaba a Fase 1 o no, la idea original para su boda era casarse en Granada de dónde es la familia de Miriam, pero ellos viven en Madrid y estaba claro que la movilidad entre provincias en ese momento no era una opción.
Miriam y Miguel habían tomado la decisión de casarse en Madrid ese día fuera como fuera la ceremonia, reservaron una iglesia en el centro de la ciudad, y hasta el mismo lunes no supimos con seguridad si nosotros podríamos ser su fotógrafos de boda.
Para que os vamos a engañar, nos fuimos a Madrid con bastante miedo y un montón de gel hidroalcohólico, pero también muy emocionados y con muchas ganas de formar parte de un momento tan bonito y emotivo. Ellos decidieron seguir adelante con su boda a pesar de las dificultades, fueron valientes en un momento en el que el miedo era el sentimiento generalizado en casi todo el mundo y pusieron su amor por encima de lo demás.
Al igual que Miriam y Miguel, y suponemos que la mayoría de los novios que se iban a casar este 2020, teníamos dudas sobre como sería la boda, como nos sentiríamos al ver a todos los invitados con mascarilla, ¿sería una buena o una mala sensación? ¿Se perdería el encanto característico de las bodas por llevar las mascarillas? ¿Sería más triste que alegre?
Pues la verdad es que sin o con mascarilla los invitados son la familia, son los amigos a los que reconoces aunque solo se les vea de ojos para arriba y no se necesita más que la mirada para transmitir emoción y alegría. Para nosotros la boda de Miriam y Miguel fue una experiencia súper bonita, dónde quedó clarísimo que lo importante de verdad a la hora de casarse es el amor y rodearte de las personas que más quieres. Tuvieron una ceremonia preciosa, muy muy emotiva y llena de alegría.
En estos momentos en los que todo es incertidumbre con respecto a las bodas pensamos que todas las opciones son buenas, vosotros novios que os ibais a casar o que seguís pensando en casaros este año, toméis la decisión que toméis será la correcta y todos los motivos son válidos tanto para hacerla este año como para aplazarla al que viene.
Lo único que de verdad tenéis que tener en cuenta para tomar la decisión final es que celebrar vuestra boda, sea cuando sea y de la manera que sea, os haga felices.
